Una falsa filosofía sobre la vida, sobre el amor, sobre la compasión, sobre la misericordia, sobre la caridad, sobre la fraternidad, sobre la paz, sobre la armonía, y muchas más que aparentemente ayuda el progreso del desarrollo humano en su relación con el YO mayúsculo, con prójimo y con el entorno de la creación, más que edificar, ha destruido y ha deformado, la armonía en la unidad con la creación entera, que tanto anhelado, formado y edificado por los maestros y formadores de la vida con tantos trabajos, sacrificios, hasta derramar la sangre por la unidad, la paz, la justicia, sin embargo, a lo largo de los años y hasta hoy en día, todos estos esfuerzos, poco a poco desdibujado y arrastrado por el corriente del egoísmo, la soberbia, y el orgullo de aquellos que se autonombre como los dioses.
Es muy triste vivir la vida ante la hipocresía de aquellos que arrastran a toda la humanidad con su buena oferta del progreso mediante sus programas, ideas, propuestas, tácticas del desarrollo para ofrecer la mejor vida, que aparentemente ayuda la humanidad, y sin embargo, son la máscara que en el fondo de todo esto, hay un interés para el beneficio personal y con aquellos que están su entorno. Han abusado la inocencia de las personas indefensas que están verdaderamente necesitan la atención y el ayuda de su prójimo.
Hoy en día vivimos en un mundo sangrado, destrozado, y agonizado que está gritando y llorando por el dolor, que implora la justicia Divina ante las matanzas, violaciones sea del derecho humano o de la creación, abortos, prostituciones, injusticias, discriminaciones, manipulaciones, abusos, corrupciones, guerras, etc… vivimos en un mundo desgarrado por abuso de exploración de los recursos naturales, la destrucción de los bosques, la extinción de los animales, y lo más triste y cruel de todo esto es, la extinción de la raza humana.
Homo homini Lupus, el frase de Thomas Hobbes que nos muestra la crueldad de este ser animal razonal, que ataca en contra de su propia raza y con toda la creación. El hombre es lobo para el otro hombre, es una realidad en el mundo actual, porque éste se convierte en un animal salvaje en contra de su propia raza. Podemos decir que es la degradación de la dignidad y el respeto que merece el ser humano; ha desperdiciado los valores de la vida, por lo tanto, es un hombre sin compasión, sin misericordia, y sin amor; está perdido y ahogado en el lago de sangre en un mundo sin sentido; un hombre que está vagando en la tierra del olvido, sin rumbo y sin esperanza. Vive de su egoísmo, su orgullo y su soberbia, satisface su sed de sangre matándose a otros, despedazar los cuerpos humanos, eliminar los fetos humanos, y muchas más.
Muchos pretextos y motivos para que los hombres se eliminan entre sí, para mencionar, los motivos de la religión, la política, la economía, social, cultural, raza, y etc… todo esto, nace por la provocación de aquellos que quieren controlar el mundo con su riqueza robada fruto de la opresión y la manipulación a los pobres. Y todos nosotros, como corderos a seguir su pastor, matándonos unos a otros como si fuéramos el dueño de la vida.
Preguntémonos, ¿dónde está el valor de la vida? ¿Dónde están aquellos que hablan de los “derechos” que se dicen tienen ojos, y sin embargo no ven, tienen boca, pero no hablan? ¿Acaso ya son como estatua que sólo una presencia simbólica, sin embargo, como un muerto torturado por el miedo?
Este mundo necesita las personas como: Juan Pablo II, Nelson Mandela, Gandhi, Martín Luther King, Madre Teresa de Calcuta, que son héroes contemporáneos, que hablaron no sólo con las palabras dulces y conmovedoras, sino, con las obras y su propia vida, porque muchas veces amenazados de muerte por los envidiosos, y sin embargo, tienen espíritus de guerreros.
¿Acaso que los hombres no tienen el valor de luchar para vivir y gozar, la libertad y la paz? ¿Y tú por qué te quedas callado ante esta situación? ¿Acaso eres partidario de los destructores?
Mira al interior de tu vida, leventes la cabeza y actúa como hombre de fe.
Patrisius Frans.
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